Comando agrede a militares en Guerrero

Chilpancingo.- Un convoy de sicarios que se desplazaba a bordo de cuatro camionetas atacó a un grupo de militares cuando realizaban un patrullaje en el sector oriente de Chilpancingo; tres militares resultaron heridos y un pistolero murió, los demás agresores lograron darse a la fuga.

Los hechos ocurrieron alrededor de las diez de la noche del domingo 19 de septiembre, cuando el convoy de presuntos delincuentes tuvo a la vista una unidad tipo Hummer de la 35 zona militar con cinco elementos a bordo.

Los delincuentes accionaron armas de diferente calibre sobre los soldados sobre la calle principal de la Colonia el Tomatal, ubicada en la parte oriente de la capital de Guerrero, logrando herir a tres elementos, los que de acuerdo a los mandos castrenses, no se encuentra graves.

Los soldados repelieron la agresión y se pertrecharon, solicitando refuerzos y manteniendo a raya a sus agresores.

Cuando los refuerzos llegaron, los delincuentes emprendieron la retirada, dejando en el lugar cuatro camionetas, entre ellas una Patriot color gris, una Honda Pilot blanca, una Edge roja y una Murano color gris.

Un presunto sicario fue alcanzado calles arriba y privado de la vida de un disparo en la cara, murió teniendo un arma de fuego en la mano.

En el interior de la camioneta Honda Pilot se encontraron seis granadas, un rifle de asalto Ak-47 y varios cargadores abastecidos de cartuchos.

En las otras camionetas también fueron abandonados rifles de asalto y pistolas, aunque todavía no se tenía un recuento total de armamento asegurado.

Durante la madrugada del lunes, elementos del Ejército Nacional realizaron patrullajes de búsqueda en la colonia el Tomatal, en los asentamientos humanos aledaños y en los cerros que van a dar hacia el libramiento a Tixtla.

Los mandos militares que acudieron al lugar de los hechos dieron una primera versión sobre lo ocurrido, confirmando que se trató de una agresión iniciada por los presuntos delincuentes, la cual dejó el saldo de tres elementos con heridas leves y un agresor muerto.

El personal del Servicio Médico Forense (SEMEFO) pudo comenzar a realizar el levantamiento cadavérico hasta después de las dos de la mañana.

Hasta entrada la madrugada, el ambiente en Chilpancingo era tenso y las versiones sobre presuntas balaceras en diferentes partes de la ciudad eran recurrentes.

En el lugar no había elementos de la Policía Investigadora Ministerial (PIM) ni de la Federal Preventiva (PFP), aunque sí de la estatal y la municipal, que se limitaron a establecer un cerco en torno al perímetro asegurado por los militares.